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Especial sobre la VI Muestra Sci Fi de Cine Fantástico

Por | 28 marzo 2009 | Comentar


Este año también he tenido la oportunidad de pasarme por Madrid para disfrutar de la muestra de cine fantástico organizada por el canal Sci Fi. Como de costumbre, el buen criterio en una selección de películas orientada a los géneros de terror, animación, ciencia ficción o thriller aseguró dosis de disfrute cinematográfico a los presentes en cada una de las sesiones. De lo exhibido me vuelvo a quedar con una cinta ya vista en el pasado festival de Sitges: Déjame entrar (Let the right one in), verdadera joya que pivota sobre el prolífico asunto vampírico desde un punto de vista poco habitual. No sé si llegará a estrenarse en nuestras salas comerciales, pero a quienes amen el buen cine les merecerá la pena escudriñar por Internet o en tiendas de DVD para dar con ella. En elojocritico.net, la revista digital que dirijo, hemos escrito un especial hablando de algunas de las películas vistas. Si queréis saber más de este festival y de sus pelis, pinchad aquí.
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[+] Sitges 2008: magnífico el sueco Alfredson; terrorífico el inglés Watkins; no defrauda el brasileño Meirelles
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Watchmen

Por | 06 marzo 2009 | Comentar


Deuda saldada

Puede que a Snyder le falte algo de arrojo para distanciarse del material original heredado, pero pocos reparos se le pueden poner como aplicado alumno que recita casi sin tacha la magistral lección del genio Moore. El cine ha saldado su deuda con Watchmen.En las bidimensionales historias de superhéroes hubo un punto de inflexión, un antes y un después, tras la publicación hacia mediados de los ochenta del cómic escrito por Alan Moore e ilustrado por Dave Gibbons. Salvo alguna casual coincidencia estética en los trajes de sus personajes, Watchmen no contaban con herencia argumental alguna respecto a las populares historietas de Lee, Kirby o Buscema sobre las que se erigió el emporio de la Marvel (Spiderman, Iron Man, Hulk, etc.). Era lógico. El autor de V de Vendetta, Miracleman o From Hell iba siempre un paso por delante. Su genialidad y transgresión le convertirían en un autor inclasificable, de ideas al margen de toda corrección política y, con el tiempo, en torno a él se cimentarían esa imagen actual suya de ermitaño inaccesible.